Sofi Morandi se encontraba saltando la soga como todos los días, ya que es su cuota de gimnasia en tiempos de cuarentena, y de golpe vio cómo su cotorra Nélida se escapaba de la jaula.

Ante semejante sorpresa, la youtuber intentó atrapar a su amada mascota, pero fue en vano. Cuando salió a la calle para ver dónde estaba, su cotorra estaba plácidamente parada en la puerta del almacén de al lado, por supuesto sin barbijo, y siendo observada por un reducido número de personas. Para Sofi fue un shock. El despelote terminó con la partida definitiva de Nélida, del hogar de Morandi.